TERCERO, EMPIEZA A PENSAR

Alberto Benitez
4 min readMar 7, 2024

¿A qué palabras hay que poner atención? ¿Qué palabras nos ponen sobre la pista para tener claros las secciones de El Príncipe, las partes en las que se divide?

En este momento, le llevo ventaja al lector porque he leído El Príncipe varias veces.

Esto se remedia fácilmente: el lector de estas líneas debe leer el texto de Maquiavelo. Varias veces. El texto es muy breve. Es una verdadera obra de bolsillo. Se lleva fácilmente y se lee en el transporte público o en la sala de espera. Además, es un libro de verdad coqueto. Muy, muy guapo. Robert Green, el autor de Las 48 leyes del poder, dice que El Príncipe de Maquiavelo es una de las obras que más lo han influenciado. Porqué lo influenciaron es interesante. Dice que la leyó de muy joven, en la adolescencia. No la entendió. Pero aunque no lo entendió pudo sentir la fuerza del texto. Ideas claras, ejemplos concretos, razonamientos, cadenas de razonamientos, analogías… El libro lo ponía alerta, lo hacía poner atención. Sintió la lectura como si tuviera que seguir una pista, las huellas del pensamiento.

Esta obra es de verdad emocionante. Nos pone en cierto ánimo, en cierta sintonía. La fuerza de los ejemplos que comparte nos pone la vida ante los ojos. Este librito es como una alta montaña desde la que podemos contemplar la vida, o como un valle amplio y despejado desde el que miramos el cielo. Ha permanecido como best seller durante más de quinientos años, y al leerlo es muy fácil explicarnos porqué es tan popular. La claridad con que imaginamos el Renacimiento se debe en gran parte al poder de este libro. Maquiavelo pudo haberlo intuido, y quién sabe si se lo dijo a sí mismo en la soledad de su exilio. Pero yo creo que él sabía que sólo los lectores de Heródoto o de Tucídides podían sentirse como contemplando la vida en la Grecia antigua así como los lectores de Maquiavelo nos sentimos como viendo el Renacimiento: las ideas y los deseos de papas y reyes y príncipes, sus ejércitos moviéndose en Italia, las sesiones de sus consejos.

Pero Maquiavelo no necesita publicistas. El que lo lee siente su poder.

Me gustaría escuchar al lector y conocer la, las impresiones que el libro te ha dejado, lo agradecería mucho.

Me he desviado y debo retomar el rumbo.

Para continuar, tenemos que hacer el índice que Maquiavelo no hace. Tenemos que identificar las partes, las secciones del edificio que componen la obra: el lobby, las escaleras, las oficinas, la cocina, etc.

Si la materia son los gobiernos (repúblicas y principados) pero sobre todo, cómo hacer para tomarlos y gobernarlos, entonces las huellas a seguir son:

  • las diferencias entre repúblicas y principados
  • cómo estas diferencias definen el modo en que se gobierna cada uno
  • qué problemas para gobernarlos hay en cada uno
  • cuáles son los medios para alcanzar y sujetar el poder

Y así, releo:

El capítulo 1 al 5, hablan de los gobiernos que existen, y que han existido. Principados y repúblicas: los estados no gobernados por una familia sino por un sistema de leyes. Esta sería la primera parte de El Príncipe: Qué tipos de gobiernos hay, cuáles son sus diferentes condiciones de gobierno.

En el capítulo 6, hay la palabra que nos indica el cambio de tema es “principados nuevos”. Ya sabes qué tipos de gobierno existen. Pero, ¿cómo se crean nuevos gobiernos? Este tema (qué principados nuevos hay) implica tanto como señalar qué principados nuevos se pueden crear. Va de los capítulos 6 al 11.

Cada clase de principado nuevo es definido por un talento o característica del príncipe: obtenidos por el talento y armas propias, obtenidos por suerte, obtenidos por crímenes, obtenidos por decisión de los ciudadanos (hoy diríamos elecciones), y los concedidos por gracia Divina. En total cinco tipos de talento o recursos o tipos de carácter que el conquistador usa para tomar el poder en una ciudad.

En el capítulo 12 desaparece la palabra “príncipe” y aparecen las palabras “armas” y “ejércitos”. Está en los capítulos 13 y 14. Así que la tercera parte de El Príncipe son los capítulos 12, 13 y 14 que tratan de los ejércitos.

En el capítulo 15 empieza la cuarta parte. El título de este capítulo 15 nos lo indica: “De aquellas cosas por al cuáles los hombres y especialmente los príncipes son alabados o censurados”. El tema ya no es ni los tipos de ejércitos ni los tipos de gobierno, sino por qué un príncipe se gana la opinión pública. Los nombres de cada capítulo nos indican que este tema va del 15 hasta el 23.

Hay que señalar que esta tercera parte es la más extensa de El Príncipe: 9 capítulos. La primera parte son 5, la segunda 6, la tercera 3.

Sólo quedan tres capítulos de los 26 que componen la obra, titulados 24 “Por qué los príncipes de Italia perdieron sus estados”, 25 “El poder de la fortuna en las cosas humanas y de los medios para oponérsele” y finalmente 26 “Exhortación a liberar a Italia de los bárbaros”. Los títulos del 24 y del 26 se corresponden, el capítulo 25 tiene un título muy extraño.

Yo asumo que, colocado por el autor en medio de dos capítulos que claramente se corresponden, entonces compone con los otros el mensaje con el que se quiere concluir la obra.

¿Qué lectura le das tu, compañero lector?

--

--